"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Reportaje
A propósito del informe/estudio del Famma Cocemfe Madrid y Ministerio del Interior sobre delitos de odio contra personas con discapacidad en España
Del odio al delito
23/12/2016
Beatriz Sancho
No fue el primero ni el último delito de odio contra una persona con discapacidad, pero el dramático caso de Arancha, la adolescente con discapacidad intelectual y motora que a sus 16 años decidió quitarse la vida, en mayo de 2015, porque estaba "cansada de vivir" como consecuencia del acoso escolar que, según denunció su familia, recibía por parte de un alumno de su instituto de secundaria en Madrid, ha sido el detonante para que en Famma-Cocemfe, lo cuenta su presidente Javier Font, se haya puesto a trabajar para exterminar los delitos de odio perpetrados contra las personas con discapacidad.
También el presidente del CERMI, Luis Cayo Pérez Bueno, por supuesto, se sumó a este cuórum, y en la jornada denunció con severidad la realidad que viven muchas personas con discapacidad, "uno de los grupos sociales más expuestos a estas agresiones motivadas por el odio". Por ello, exigió una respuesta penal "más contundente" para los delincuentes, al tiempo que se rebeló contra aquellos ciudadanos que siguen considerando a las personas con discapacidad "seres inferiores y menos valiosos".
El Gobierno de la Comunidad de Madrid (CM) también se alza contra los delitos de odio y, de hecho, según recordó el viceconsejero de Presidencia y Justicia de la comunidad autonómica, Enrique Ruiz Escudero, en su propia ponencia dentro del mismo evento, desde el Gobierno autonómico se están poniendo en marcha medidas como "el proyecto de ley de protección contra las acciones de incitación al odio, la discriminación y la intolerancia, que ha sido sometido a consulta de los estamentos implicados". En la CM, si la iniciativa es aprobada en la Asamblea regional, habrá multas, como viene demandando el CERMI, de hasta 45.000 euros para los delitos de odio considerados "muy graves".
"El Ministerio del Interior será implacable en su lucha contra los delitos de odio para arrinconarlos y, especialmente, serán una prioridad para Interior los dirigidos contra las personas con discapacidad"
La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril Bustamante, también se postula a favor reconociendo, según ha declarado a 'cermi.es semanal', y sosteniendo que "una democracia comprometida con los derechos humanos debe garantizar la igualdad de oportunidades y de trato para las personas con discapacidad" y que, de hecho, "la obligación del Defensor del Pueblo es vigilar que las personas con discapacidad gocen del pleno ejercicio de sus derechos y evitar su exclusión social".
La Defensora del Pueblo también recordó que desde la oficina del Defensor del Pueblo se han dirigido al Observatorio Estatal de la Discapacidad y a la Dirección General de Políticas de Apoyo a la Discapacidad "para conocer el tratamiento de los medios hacia las personas con discapacidad psicosocial". Respecto al papel de los medios de comunicación, para los delitos de odio en general, Nieto les ha pedido que "se involucren en la concienciación de la ciudadanía sobre la necesidad de denunciar y erradicar estos delitos".
"Enrique Ruiz Escudero pide a los medios de comunicación que se involucren en la oncienciación de la ciudadanía sobre la necesidad de denunciar y erradicar estos delitos"
INFORME SOBRE DELITOS DE ODIO
La jornada de Famma-Cocemfe se hizo coincidir con la presentación del 'Informe sobre incidentes relacionados con delitos de odio en España 2015', realizado por el Ministerio del Interior. El documento reúne estadísticas de los delitos de odio conocidos de 2014 a 2015 y para Interior es una "herramienta imprescindible" para "erradicar aquellas conductas que atentan contra los derechos humanos" y "para adoptar las políticas más oportunas respecto a los delitos de odio" que, recordemos, para Boeckmann y Turpin-Petrosino son: “la expresión desafortunada de estereotipos negativos, prejuicios, discriminación y tensiones entre los grupos”.
Por mencionar algunos datos relevantes, además de este lamentable incremento en los infringidos contra personas con discapacidad, el informe recoge que la Comunidad de Madrid, con 28 casos, es la tercera de España más afectada en lo referente a estos delitos de odio por discapacidad, superada solamente por Andalucía (con 42 casos) y por Comunidad Valenciana (43). Curiosamente, si la víctima de tipos de delitos de odio, que suelen ser en su mayoría lesiones, amenazas o injurias, aunque hay más, son hombres, en el sector de la discapacidad, solo en la discapacidad, la situación se invierte y son más mujeres con discapacidad víctimas de delitos de odio que hombres con discapacidad. Según Font, esto es un reflejo de que, a pesar de estar trabajando para que la igualdad entre el hombre y la mujer en el sector de la discapacidad, "todavía no está lograda" y demuestra "una mayor discriminación hacia la mujer y su mayor vulnerabilidad".
"La mayoría de las víctimas de delito de odio son hombres, menos en el sector de la discapacidad que son mujeres porque todavía no está lograda la igualdad entre hombre y mujer y sufre una mayor discriminación y es más vulnerable"
Las personas con discapacidad conforman uno de los sectores poblacionales en situación de mayor vulnerabilidad y dependiendo del grado de discapacidad "se acentúa todavía más". Esta es la opinión de muchos, aunque la vierte, en este caso y para este boletín, Javier Font. "Estamos observando delitos de odio hacia nuestro sector poblacional sobre todo en colegios, como el lamentable caso de Arancha, que decidió quitarse la vida por el trato vejatorio propiciado por parte de un compañero, única y exclusivamente porque tenía discapacidad, porque era más débil. La atacaron por su diferencia", denuncia, "y la niña no pudo soportarlo más".
"A partir de este hecho", confiesa el presidente de Famma-Cocemfe, "nos planteamos que había que hacer algo. No sabíamos muy bien qué eran delitos de odio y, de hecho, todavía hay una línea muy fina entre lo que son los delitos de odios y el delito puro y duro", lamenta. "El caso es que si te agreden porque eres diferente: porque eres blanco, musulmán, chino... se ve que el delito está relacionado con la diferencia respecto a la persona que te agrede" y "por eso decidimos ponernos a trabajar con todos los agentes implicados: con la guardia civil y la policía nacional especialmente para ver los recursos que tienen en cada provincia". Además, la entidad decidió abordar el tema desde una jornada para comunicar sus demandas, la necesidad de luchar contra este tipo de delitos de odio, especialmente contra las personas con discapacidad, al ámbito jurídico, los abogados interesados en esta materia, a la Fiscalía, a la Defensora del Pueblo, los medios de comunicación, etc., para que "así conozcan las circunstancias que rodean a cada discapacidad a la hora de asistir a las víctimas".
En este sentido, Javier Font manifestó que en esta gesta "también deben estar presentes los Servicios Sociales y los gobiernos autonómicos", y aprovechó la oportunidad para invitarles desde este periódico, así como a todos aquellos agentes que beneficiarían el despliegue de este proyecto.
DEMANDAS: CAUCES, PROTECCIÓN Y CASTIGO
Hay muchas personas, y entre ellos el presidente de Famma-Cocemfe, que compara la situación de los delitos de odio, en general, con la que vivían las mujeres víctimas de violencia machista hace unos años cuando "no podía denunciar". Dice Font que fue cuando se pusieron los mecanismos oportunos para que pudieran hacerlo, fue cuando mejoró algo la situación. "En el caso de los delitos de odio ocurre lo mismo. No existe un canal concreto y directo para denunciar, y quizás por ello no muchas personas denuncian las agresiones que reciben porque no saben muy bien qué hacer", lamenta.
Para revertir esta situación, para caminar sobre la senda de los objetivos logrados en la lucha contra la violencia de género, el presidente de la entidad madrileña pide "un marco de protección", y la puesta en marcha de una serie de mecanismos apelando a los derechos humanos. "Marco legal tenemos más que suficiente", indicó, "por eso hay que insistir en un marco específico como la ley que va a crear la CM contra los delitos de odio, que recogerá la protección a las personas con discapacidad y, desde luego, castigos ejemplarizantes. Es precisamente lo que toca".
"Es muy importante poner de manifiesto las situaciones que viven muchas personas con discapacidad: para que logremos poner en marcha los mecanismos oportunos y sepan cuáles son los canales que tienen a su disposición, denuncien y tengan un sistema que les proteja"
"Hay muchas personas con discapacidad que están solas en la vida o dependen de una sola persona, de su cuidador, las 24 horas del día. Su situación es de indefensión, de desprotección, y es muy preocupante", cuenta consternado Font refiriéndose a casos concretos de personas que conoce. "Sufren delitos de odio en silencio y lo silencian porque su dependencia les impide utilizar los canales para denunciar y, además, se encuentran con que una vez denunciada su situación, no tienen medidas de protección por parte de la Administración, ni de los Servicios Sociales", insiste. "Por eso era muy importante poner de manifiesto las situaciones que viven muchas personas con discapacidad: para que logremos poner en marcha los mecanismos oportunos y sepan cuáles son los canales que tienen a su disposición, denuncien y tengan un sistema que les proteja".
FRUTOS DE LA JORNADA Y CASOS ABERRANTES
Uno de los logros de la jornada realizada por la entidad Famma-Cocemfe ha sido "poner de manifiesto esta carencia", argumenta el presidente. "Es cierto que ya se está trabajando en un protocolo de actuación ante delitos de odio, el de la Policía Nacional y la Guardia Civil, pero no consta de todo el entramado necesario para empezar a trabajar en ello de forma coordinada", continúa Font, "motivo por el cual "otra de las iniciativas" que ha parido el encuentro es: "la creación de un grupo de trabajo que reúne a la Fiscalía, abogados, Policía Nacional y Guardia Civil, y que queda abierto a todos los agentes que se quieran implicar para crear un protocolo concreto de actuación, en caso de que exista un delito de odio, para que la víctima sepa cómo hay que actuar, a dónde se tiene que dirigir, cuáles son los medios o instrumentos a su disposición, y cuáles habrá que poner en marcha para activarlo".
Sin embargo, para que tenga éxito grupo de trabajo Javier Font apuesta por una profusa difusión. "No podemos crear un grupo de trabajo y que no se conozca. Hay que realizar una labor de difusión ordenada y concreta porque de nada sirve hacer muchas cosas, que se queden en titulares, y que al final no se consiga materializar nada".
Font añadió que desde su entidad han creado una serie de documentos, pero que esto "no es suficiente" y, a partir de este punto, "hay que empezar a trabajar, hacer un seguimiento". Para ello, reclama un "observatorio" que revise con periodicidad qué está ocurriendo respecto a los delitos de odio contra las personas con discapacidad, y que realice ajustes anualmente para mejorar las circunstancias vitales de estas personas. "Esta es obligación por parte de la Administración y, en concreto, de los Servicios Sociales", reitera el presidente de Famma-Cocemfe para quien también es crucial que "no solamente denuncie el afectado, sino quienes están a su alrededor".
"No solamente es crucial que denuncie el afectado, sino quienes están a su alrededor"
"A personas nuestras, por ejemplo con ataxias, una patología que te hace perder el equilibrio, no hablar bien... se les ha prohibido entrar les han impedido la entrada a un lugar. Hay personas con discapacidad que han sido apartadas en los restaurantes porque a otros clientes les molestaba su presencia", argumenta Font. "¿A qué se debe? A la falta sensibilización, información y, sobre todo, en los colegios, donde debemos actuar, ya que son las raíces del tronco para que, al final, aparezca la solidaridad, la comprensión y la integración del diferente, se facilite la convivencia entre unos y otros. Hay que aprender a convivir con lo diferente". En este sentido, el nivel cultura del país en concreto, para este hombre con discapacidad, es "muy importante".
"Hay personas con discapacidad que han sido apartadas en los restaurantes porque a otros clientes les molestaba su presencia"
"Tenemos un compañero que quería hacer obra en su casa, es usuario de silla de ruedas, y como a muchos vecinos le molestaba, alguien le pinchó las cuatro ruedas del coche, se lo arañaron y le escribieron carteles y notas con las palabras: ¡puto cojo!", retrata Font. "Ese tipo de cosas son absolutamente deleznables y que hay que ponerlas coto mediante mecanismos, pero la Educación aquí es fundamental. La diferencia no tiene porqué asustar, sino todo lo contrario, enseña lo que es prioritario en la vida y lo que no, a relativizar las cosas, etc. Hay que enseñar desde el colegio y también en la familia".
PIONEROS
"Que yo sepa no existe ninguna entidad del tejido asociativo de la discapacidad que haya abordado de esta manera el tema de los delitos de odio. Sí, puede que este sea un proyecto pionero, pero nos gustaría que otras entidades autonómicas se unan a este trabajo", comenta Javier Font respecto a esta encomienda de grupo que nace de una inquietud común y que afecta a todo el sector de la discapacidad. "De hecho, a la jornada sobre delitos de odio invitamos al presidente del CERMI precisamente para que tomara nota de lo que ocurría y extendiera nuestra preocupación a nivel autonómico porque las Comunidades Autonómicas son quienes tienen competencia en este asunto. El CERMI debería liderar alguna labor en conjunto".
"Javier Font: el CERMI debería liderar alguna labor en conjunto para luchar contra los delitos de odio contra las personas con discapacidad"
Mientras ponen en marcha la maquinaria pretendida, Famma-Cocemfe, por su idiosincrasia autonómica, irá viendo con la CM qué pueden hacer, aunque, luego, "la experiencia piloto sería conveniente que se extendiera a otros lugares de la geografía española. Se trata de allanar un poco el camino, pero que después se puedan beneficiar todas las discapacidades a nivel estatal. Nuestro objetivo es que esta situación se conozca, y cuanta más gente colabore mejor, para hacer más sensible el trabajo y que redunde en todos, que de eso se trata".
"Ahora, lo que hace falta es ese observatorio. Tenemos que cerrar los eslabones de una cadena de colaboración entre la Administración, el tejido asociativo de la discapacidad y los profesionales para ponernos mano a la obra porque si no este un problema que, desgraciadamente, se puede agravar". En esta línea, Font apela a la "necesaria búsqueda de alianzas entre unos y otros" para "inculcar nuevos valores en la ciudadanía" y así evitar actos "deleznables" que atentan contra los sectores de población más vulnerables.
MEDIDAS Y PROTOCOLO
El Ministerio del Interior ya ha adoptado una serie de políticas públicas de prevención y de asistencia a las víctimas de delitos de odio, y en especial, ha tratado de crear mayor sensibilización y de “avivar” la conciencia de la sociedad española ante los incidentes relacionados con estos delitos. De esta forma, según Interior, el 'Informe sobre incidentes relacionados con delitos de odio en España 2015' "cobra especial importancia la cooperación de los grupos de la sociedad civil y ONG que representan a las minorías o víctimas de estos delitos con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad" porque "permite, entre otras cosas, mejorar los niveles y cuotas de confianza de las víctimas de la discriminación y el odio en las instituciones que les protegen: las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad".
"José Antonio Nieto advirtió de que queda lo más difícil: crear una conciencia indudable en la inmensa mayoría de la sociedad para marginar a los delincuentes"
El secretario de Estado de Seguridad, por su parte, enumeró en la jornada sobre delitos de odio las medidas adoptadas hasta ahora contra este tipo de infracciones y entre ellas: el protocolo de actuación para las Fuerzas de Seguridad, el endurecimiento de las penas y la mejora en la atención a las víctimas. Sin embargo, José Antonio Nieto advirtió de que "queda lo más difícil: crear una conciencia indudable en la inmensa mayoría de la sociedad para marginar a los delincuentes".
Por lo visto, a lo largo de estos últimos años, se ha realizado por el legislador español una serie de adaptaciones y reformas a nivel nacional para adecuar la normativa interna a los principios consolidados a nivel internacional respecto a los delitos de odio. Razón que llevó en 2014 a la aprobación del 'Protocolo de Actuación para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para los Delitos de Odio' que para Interior, aunque tiene una corta vida, se ha convertido en un instrumento "cardinal" a la hora de habilitar una adecuada respuesta a los incidentes o actitudes racistas, xenófobas o discriminatorias por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
CONCLUSIONES
Si algo tienen muy claro todos los agentes implicados, y por implicar, en la disminución y deseada abolición de los delitos de odio, en general, y en particular contra las personas con discapacidad, es que "hay que denunciar". Y así lo demandó en la jornada de Famma-Cocemfe, con contundencia, la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, quien además de mostrar su preocupación por el alto porcentaje de personas que no denuncian este tipo de delitos (en Europa el 80-90 por ciento), pidió a las víctimas con discapacidad de delitos de odio: "id a denunciar y dejad de pensar que acudir a una comisaría no sirve de nada o que las agresiones salen gratis". Sirven y no son gratis.
INFORMACIÓN DE UTILIDAD
Dejamos también constancia en este reportaje de las directrices del 'Protocolo de Actuación para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para los Delitos de Odio':
• Denuncie el incidente ante la Guardia Civil o la Policía Nacional, lo antes posible. Porte un documento de identidad que acredite sus datos personales.
• Facilite información detallada sobre los hechos sufridos o de los que ha sido testigo, así como del autor/es del acto, lugar, testigos presenciales, etc.
• Describa de forma literal las palabras y expresiones proferidas por el autor/es.
• Si considera que el incidente está motivado por su raza, religión, nacionalidad, cultura, orientación sexual, discapacidad, etc. señale tal circunstancia al efectuar la denuncia, y la razón de dicha conclusión (expresiones, etc.)
• Detalle, con la mayor precisión posible, datos sobre cualquier marca, símbolo, anagrama, distintivo, tatuaje, o vestimenta del autor/es de los hechos.
• Si ha sido objeto de alguna lesión, por leve que sea, acuda a un centro sanitario y solicite un informe médico, para adjuntarlo a la denuncia.
• Solicite un intérprete, si usted no comprende el idioma o se expresa mediante el lenguaje de signos.
• Después del incidente, si no va a realizar la denuncia de forma inmediata, se recomienda que anote o grabe toda la información sobre el mismo. Ello permitirá, a la hora de plasmar los hechos en la denuncia, que se recojan todos los extremos con el mayor detalle y exactitud posibles.
• La Policía Nacional o la Guardia Civil, le informarán de sus derechos y deberes como víctimas de "delitos de odio".
